El Templo Dorado es el santuario sagrado de los Sijis, esos tipos con turbante, barba y sonrientes, que parecen papanoeles, y es, además, el atractivo principal de Amristar. El resto es un tráfico enloquecido del que solo puedes preguntarte: ¿a dónde vais con tanta prisa? ¿quién os espera? ¿qué es tan importante que no puedes pararte en un semáforo ni tomar la rotonda por el lado correcto?

Un taxi en Delhi, un avión a Amristar, otro un taxi hasta el hostel de la guía Lonely, Tourist Guest House, y el taxista, con un inglés de película de western "No entrar calle coche hotel izquierda".